ATICMA
La tecnología como objetivo productivo para la ciudad
El mundo recibe a los avances tecnológicos continuos cada vez con más necesidad y satisfacción. La pandemia desatada por el COVID aceleró este sector como ningún otro debido a las necesidades laborales y de comunicación que, ante el aislamiento, sólo la tecnología pudo brindar herramientas para continuar avanzando.
En Mar del Plata, Aticma es la asociación que agrupa a profesionales independientes, emprendedores, empresas y universidades del sector TIC de Mar del Plata y la zona. Es la entidad que desde hace un buen tiempo, lleva a cabo esfuerzos y proyectos en pos de convertir a nuestra ciudad en uno de los principales polos de conocimiento y desarrollo para nuestro país.
Pero, ¿de qué hablamos cuando hablamos de Polo Tecnológico? “- Me gusta más hablar de un polo de la Economía del Conocimiento en su conjunto. Estamos hablando de una zona donde se genera valor agregado a través del conocimiento” explicó Bernardo Martínez Sáenz, presidente de Aticma.
– ¿Cómo impacta en la calle este desarrollo?
-Zonas de la ciudad o parques específicos donde hay empresas y organizaciones o institutos de investigación de alto valor agregado, que se transforman en distritos atractivos con servicios y consumo. Como sucede en Sillicon Valley, donde hay mucho valor agregado en cada hora hombre invertida. Un Polo Tecnológico es un lugar donde se tiene que fomentar el emprendedurismo, que es otro de los temas específicos que trabaja a la hora de generar tecnología. Se busca ir renovando el plantel de empresas y por eso se fomentan aceleradoras de empresas, incubadoras, etc.
-¿Mar del Plata y las Tics es una relación de posible desarrollo o sigue representando intentos que no llegan a un cauce definitivo?
-La realidad es que Mar del Plata, en Argentina, es uno de los principales focos de economía del conocimiento, aunque la mayoría de los marplatenses no lo sepan. Está dentro de las cinco ciudades de mayor generación de valor agregado en lo que es la Economía del Conocimiento. Hoy trabajan en Tics o EC, contando los ocho institutos del Conicet y las cinco universidades con muchísimas carreras enfocadas al respecto, más de 5000 personas. Representa la ciudad un posible punto de desarrollo y dentro de lo que es la Ley de EC a nivel nacional, donde se aspira a lograr en los próximos 15 años unos 120 mil puestos de trabajo, podría representar a la ciudad 20 mil puestos nuevos, lo que cambiaría la matriz productiva, mejorando otros sectores y no achicando. La EC no surge de la nada. Por ejemplo, acá no se pueden hacer desarrollos para camellos porque no los hay. Acá se pueden hacer desarrollos para el agro, la industria textil, pesquera, el cordón frutihortícola. Cuestiones de la ciudad y el país.
-¿En qué situación se encuentran el proyecto del Parque Informático e Industrias Creativas impulsado por ATICMA?
-El que estaba frente a Rumencó el gobierno municipal anterior lo frenó, lo cual significó una locura. Hoy estamos muy bien, con apoyo de Nación, Provincia y Municipio. En el HCD tenemos ya dos ordenanzas que hablan estrictamente del proyecto: una genera el distrito y la otra le da contenido; pone, por ejemplo, la exención de la TSU para las empresas de EC y genera un fondo para generar vocación en las escuelas municipales.
-¿Por qué hoy la tecnología es más importante que hace 8 meses?
-Lo que hizo la pandemia fue acelerar el proceso de transformación digital que estaba teniendo el mundo entero. Veníamos ya con una demanda insatisfecha y hoy se nos complicó más aún, pero es un lindo desafío. Nos lo está demandando Argentina y el mundo. Todo lo que es la digitalización de la educación creció y el e-commerce que crecía cien por ciento por año, en este tiempo creció al cien por mes.
-¿Qué procesos o cambios que se veían a un futuro distante, sentís que se aceleraron?
-La digitalización de la industria. Se vieron con la necesidad de hacerlo lo más posible. Tener todo en la nube, telefonía IP, etc. Al habernos puesto en primer plano, nuestro sector se aceleró mientras otros se frenaron, lo cual nos hizo llamativos para lo que es inversión. Gente que invertía en edificios hoy ve con muchos mejores ojos invertir en empresas de tecnología.
-¿Desde qué áreas cada vez más argentinos se acercan a las tecnologías e industrias creativas?
-De todas las áreas por suerte: o nos usan como herramienta o nos ven como posible forma de resiliencia. Recurren a nosotros, un área donde la demanda está insatisfecha así que necesitamos cada vez más gente.
-¿Las instituciones educativas están a la altura de las necesidades de formación para desarrollar un potencial profesional a la altura de los requerimientos mundiales?
-Es complejo porque la tecnología avanza muy rápido y en el mundo es un desafío continuo que estén a la altura. Lo que puedo decir es que Mar del Plata es una de las pocas ciudades en el mundo que tiene sobreoferta académica y falta que los chicos se inscriban. Hay más de 12 carreras afines a las TICs pero no se inscriben. Pasa en todo el mundo, porque aún se ven más como usuarios que como generadores de la tecnología, no se imaginan pudiendo desarrollar un teléfono, por ejemplo. Es muy difícil para un chico que no tiene contacto con la tecnología que pueda verse y sentirse como un transformador de la tecnología.